Sometimes I remember this kind of things you will never forget... Llega la noche de San Juan y con ella muchos recuerdos, sobre todo recuerdos que deseas que se repitan, una y otra vez... Esa noche mágica en que puedes soñar lo que quieras porque sabes que tres deseos puedes pedir y quizá el destino esta vez se acuerde de TI...
Voy a ahondar en el tema de la mágica noche de San Juan y las películas que hablan de ese tipo de fantásticos momentos.
La primer película que me viene a la mente es una de esas que recuerdas con mucho cariño, la sutil y embelesadora Vacaciones en Roma. Tanto, el arrebatador periodista fehacientemente intepretado por Gregory Peck como la sensual y pérdida princesa Anne de la siempre conquistadora Audrey Hepburn, consiguen que la química sea uno de los principales componentes de este cocktail explosivo. Una historia plagada de la típica magia que caracteriza la noche del 24 de junio. Un cuento de hadas con un toque chic, que la dulce y elegante Hepburn consigue darle con su carita de belleza recién descubierta. Adobando este cocktail con la mejor de las presencias masculinas de la época, un apuesto e interesante partenaire, el masculino Gregory (que me tiene loquita)... -seriedad-
No solo el hecho de que ella sea una princesa es lo que convierte a Vacaciones en Roma en un cuento. Si está película mostrase la actual vida (siempre manteniendo a los protagonistas originales y su charme) de una alta ejecutiva que decide dejar unos días el stress de Manhattan y trasladarse a un mediterráneo pueblo a descansar conservaria toda su estela mágica pues es un todo lo que nos enamora de ella, William Wyler consigue impregnar cada sutil plano del mejor feeling.
¿Otra película que me haya seducido irremediablemente? Sin ir más lejos la vi la semana pasada por tercera vez y sigue pareciéndome increiblemente seductora, con la magia más terrenal y mediterránea, hablo de la Bigasiana Son de mar, siguiendo este mismo son me dejo atrapar por la arrebatadora sensualidad de Leonor Watling que atrae a Jordi Mollà y lo convierte en su Ulises particular, que sabe narrar historias clásicas igual de bien como pescar atunes de temporada... El cuento de Ulises y Martina es tan trágico y pasional como cualquiera drama griego. Solo diré "He cruzado todos los oceanos del mundo para saber que no puedo vivir sin ti"... WOW
"Déjame que te cuente un cuento"..."si tu me dejas, si me das tiempo", así Lorenzo consigue que Lucia se quiera quedar para siempre a su lado y que la sirena valenciana recupere la sonrisa. La medemiana Lucia y el sexo es mi tercer cuento de hadas... no solo el faro de Formentera tiene luz propia, todos los personajes tienen ese halo interesante y atrayente, al igual que las coincidencias que son una constante en el cine del vasco. Partiendo de esto la quinta película (pero casi casi lograria el primer puesto en el rankig por todo lo que para mi significa) seria Los amantes del circulo Polar (en la foto), otra fábula que Julio Medem inventa y hace que nos llegue tan adentro como la pregunta de amor de toda la vida, que por cierto... ¿Cuál es la pregunta de toda la vida? Najwa como Ana y Fele como Otto consiguen que su cuento del revés atraviese las visceras del espectador más duro, con nombres capicua y saltando por la ventana como un valiente nos cuentan la apasionada historia de dos hermanastros que se aman por casualidad.
Un beso capicua
Voy a ahondar en el tema de la mágica noche de San Juan y las películas que hablan de ese tipo de fantásticos momentos.
La primer película que me viene a la mente es una de esas que recuerdas con mucho cariño, la sutil y embelesadora Vacaciones en Roma. Tanto, el arrebatador periodista fehacientemente intepretado por Gregory Peck como la sensual y pérdida princesa Anne de la siempre conquistadora Audrey Hepburn, consiguen que la química sea uno de los principales componentes de este cocktail explosivo. Una historia plagada de la típica magia que caracteriza la noche del 24 de junio. Un cuento de hadas con un toque chic, que la dulce y elegante Hepburn consigue darle con su carita de belleza recién descubierta. Adobando este cocktail con la mejor de las presencias masculinas de la época, un apuesto e interesante partenaire, el masculino Gregory (que me tiene loquita)... -seriedad-
No solo el hecho de que ella sea una princesa es lo que convierte a Vacaciones en Roma en un cuento. Si está película mostrase la actual vida (siempre manteniendo a los protagonistas originales y su charme) de una alta ejecutiva que decide dejar unos días el stress de Manhattan y trasladarse a un mediterráneo pueblo a descansar conservaria toda su estela mágica pues es un todo lo que nos enamora de ella, William Wyler consigue impregnar cada sutil plano del mejor feeling.
¿Otra película que me haya seducido irremediablemente? Sin ir más lejos la vi la semana pasada por tercera vez y sigue pareciéndome increiblemente seductora, con la magia más terrenal y mediterránea, hablo de la Bigasiana Son de mar, siguiendo este mismo son me dejo atrapar por la arrebatadora sensualidad de Leonor Watling que atrae a Jordi Mollà y lo convierte en su Ulises particular, que sabe narrar historias clásicas igual de bien como pescar atunes de temporada... El cuento de Ulises y Martina es tan trágico y pasional como cualquiera drama griego. Solo diré "He cruzado todos los oceanos del mundo para saber que no puedo vivir sin ti"... WOW
"Déjame que te cuente un cuento"..."si tu me dejas, si me das tiempo", así Lorenzo consigue que Lucia se quiera quedar para siempre a su lado y que la sirena valenciana recupere la sonrisa. La medemiana Lucia y el sexo es mi tercer cuento de hadas... no solo el faro de Formentera tiene luz propia, todos los personajes tienen ese halo interesante y atrayente, al igual que las coincidencias que son una constante en el cine del vasco. Partiendo de esto la quinta película (pero casi casi lograria el primer puesto en el rankig por todo lo que para mi significa) seria Los amantes del circulo Polar (en la foto), otra fábula que Julio Medem inventa y hace que nos llegue tan adentro como la pregunta de amor de toda la vida, que por cierto... ¿Cuál es la pregunta de toda la vida? Najwa como Ana y Fele como Otto consiguen que su cuento del revés atraviese las visceras del espectador más duro, con nombres capicua y saltando por la ventana como un valiente nos cuentan la apasionada historia de dos hermanastros que se aman por casualidad.
Un beso capicua
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